DANITURN IN THE RIVER

A las 6 de la mañana del 11 de Junio de 2011 daba comienzo el viaje que nos llevaría a pisar la “Tierra Prometida”. Muchos dicen que es otro mundo, y realmente no lo puedes ni imaginar hasta que no estás allí. Pero cuando pisas territorio 'gambler' te contagias sin darte cuenta del ritmo de la ciudad. Hay que sentirlo por lo menos una vez en la vida.


El viaje completo duró prácticamente 18 horas. 8 horas de Barcelona a New York y después 4 horas de espera hasta coger el vuelo directo a Las Vegas que duraría unas 6 horas más. La espera en NY nos permitió a Gerard y a mi probar una auténtica hamburguesa americana (ni punto de comparación con las de aquí).

American Ailrines

El primer vuelo, aunque más largo, fue algo más cómodo porque el avión era más grande y tuvimos 2 asientos contiguos sin necesidad de compartirlo con nadie más, así que teníamos espacio suficiente incluso para echar unas manitas de entrenamiento. Gerard se pasó medio viaje durmiendo y medio viaje leyendo revistas de póker a ver si se le pegaba algo de “los buenos” durante el vuelo. Yo me pasé el viaje sufriendo un aire polar que no sé de donde venía pero que me hizo ponerme la chaqueta y taparme con la mantita que nos ofrecían. Llegué a NY tocado ya.




El segundo vuelo fue bastante más incómodo por ser un avión más pequeño y además nos dimos cuenta que un señor muy amable y muy mudo nos había robado el asiento de la ventanilla, con lo cual veríamos Las Vegas desde el aire a medias. ¡¡Maldito asiático !! XD
Coincidimos por primera vez con alguien que sabíamos que venía a lo mismo que nosotros. A por un brazalete. Raúl “Toro” Páez viajaba unas filas más adelante.

En esta ocasión Gerard se pasó el viaje entero durmiendo, sólo se despertaba cuando venían a traernos algo de beber. Me aburrí bastante porque además las pelis que pusieron eran una auténtica basura. Pero en el fondo daba igual….estábamos a punto de llegar a Las Vegas ¡

Y después de todas esas horas, de todo ese frío y de todo ese sueño acumulado, el asiático me jodía las vistas pero estirando un poco el cuello ya podía intuir que habíamos llegado al lugar donde tantas veces había soñado estar:

¡¡ WELCOME TO FABULOUS LAS VEGAS !!

Strip Las Vegas

Bajamos del avión con la emoción de mochila y el interior del aeropuerto ya nos empezaba a emocionar. Tragaperras en los pasillos, al lado de las máquinas de bebidas, de los bares… El aeropuerto olía a dinero! Pero dentro de nuestras conciencias sólo nos preocupaba una cosa en ese momento: Las maletas. Ahora iba a ser la hora de la verdad, con nuestro inglés macarrónico de videojuego teníamos que apañarnos. Decidimos utilizar la lógica y seguir a todos los que iban en nuestro avión en busca de las maletas. Más de 100 personas siguiendo al primero que bajó... pensamos: “Lo jodido es que el primero que bajó no llevase maleta!!”. Tuvimos que coger una especie de tranvía que nos llevaba supuestamente hasta nuestra maleta. He de decir que cuando aquello estaba en marcha nos invadió la duda de si estábamos haciendo lo correcto, jajaja. Pero una vez fuera, vimos la luz. La del cartel luminoso que anunciaba que por allí saldrían nuestras maletitas, llenas de sueños por cumplir. Por fin…pisamos la calle y nos asalta un hombre que nos habla muy mal y muy rápido. Primer examen de inglés nada más aterrizar, que estrés ¡!
El buen hombre nos ofrecía transporte hacia nuestro hotel pero nos señalaba un coche negro, con los cristales tintados y largo, muy largo, pero muyyy largo. Vamos, una Limusina ¡ Jajaja. Gerard y yo nos miramos como diciendo…”¿Este es el trato que vamos a recibir todos los días ? Y yo quise prácticar mi inglés y le pregunté…
-How much?
- Sixty, me dijo el hombre.
Automáticamente le dijimos…
- Ouch, good night, thanks!  Y nos montamos en un minibús por 6$.


Unas 10 personas recién llegadas a Las Vegas nos dispusimos a hacer la primera ruta por el Strip, de hotel en hotel iban bajando pasajeros. Nosotros fuimos los penúltimos en bajar y Gerard, cómo no, se perdió el paisaje, se tiró todo el viajecito durmiendo... ¡¡otra vez !!

Hall Hotel Luxor

Cuando lo desperté, casi a guantazos, ya habíamos llegado al Hotel Luxor. Nada más entrar al 'hall' del hotel vimos que todo allí iba a ser espectacular. Llegamos a la habitación a dejar las maletas y decidimos ir a pasear por Las Vegas de noche, no podíamos esperar más. Además, Gerard parecía con muchas ganas (nos ha jodido, después de 15 horas durmiendo…XD).

La primera noche... y sólo podíamos repetir una frase:
“¡¡¡Tío…estamos en Las Vegas!!!”

Tienda Viva Vegas, Fremont St.